Aquí os dejo actividades para trabajar en 1ª de Primaria a
través de un texto sencillo y compactado donde se requiera una única fijación
global que le permita al niño reconocer la totalidad de lo que se encuentra
alrededor de un punto fijo.
-Preparación:
Texto que se va a leer:
El pollito inglés
Había una vez un pollito inglés que se fue a Francia y se
volvió francés.
El texto tendrá el
tamaño y letra adecuados para favorecer a la lectura.
Mediante este texto vamos a trabajar tanto la comprensión
como la trasmisión.
La transmisión requiere una buena articulación,
pronunciación, pausas etc, por lo que es más difícil para los niños.
La comprensión que es interpretar, en el cual el cerebro
hace el proceso de relacionar lo que se lee con otros aspectos. El niño deberá
de leer el texto las veces que le sean necesarias para poder comprender el
texto antes de leerlo en voz alta y transmitírselo a sus compañeros.
Hay que indicarle a los niños como hay que prepararse el
texto:
-Hay que leerlo en silencio para poder comprenderlo una,
dos, tres… las veces que sea necesario para poder comprenderlo.
- Si hay alguna palabra desconocida se preguntará o se
buscará en el diccionario para poderle dar el significado correspondiente en el
contexto.
- Una vez que se ha comprendido el texto, hay que pensar en
la intención del autor: si el objetivo es hacer reír, crear intriga, asustar,
transmitir sentimientos… Esa intención debe ponerse de manifiesto en la
lectura.
-Para preparar correctamente la lectura oral y entrenarla,
es importante saber cómo se pronuncian los nombres propios y/o las palabras que
están en otro idioma –habitualmente en inglés- para verbalizarlas
correctamente. El profesorado de lengua extranjera puede ayudar al lector con
estas cuestiones.
- El siguiente paso es realizar una primera lectura oral
para escucharse a uno mismo. Así somos conscientes de cuáles son las frases o
palabras que se 2 “atascan” y podremos entrenarlas de forma específica. Una
buena estrategia es subrayarlas para tenerlas presentes y encontrarlas a simple
vista cuando se está poniendo en práctica la anticipación ocular.
- A esa primera lectura le seguirán otras encaminadas a
entrenar el proceso atendiendo a los signos de puntuación, entonación,
articulación, pronunciación y dicción. o Una vez familiarizados con el texto,
debemos continuar entrenando para ajustar los aspectos que tienen que ver con
la transmisión de la intencionalidad: intensidad, entonación, ritmo, pausas
emocionales, miradas al público, etc.
-Cuanto más y más veces entrene el niño, mejor leerá. Como
para un niño las indicaciones pueden ser demasiado abstractas, es fundamental
ejemplificar todo el proceso varias veces al principio de los cursos y apoyarlo
entrenando CON los niños que vayan a leer ante la clase al menos durante el
primer trimestre
-Además cuando llegue el momento de realizar la lectura ante
la clase, el profesor recordará al lector cuál es la postura adecuada y lo
animará a transmitir a sus compañeros el texto que solo él posee. El grupo,
mientras, lo escuchará con atención. Una vez finalizada la lectura, se pondrán
de manifiesto los aspectos positivos (aciertos y avances) y, por último, se
darán indicaciones sobre cuestiones mejorables. Podemos preguntar al grupo
sobre lo que han escuchado (con lo que podemos evaluar la atención y la comprensión
oral) y dialogar brevemente sobre el contenido de lo leído.
- Cada uno de los textos puede ser leído por varios niños el
mismo día o en días diferentes. Tanto las lecturas del profesor como los de los
compañeros pueden servir de modelo de lectura. Del mismo modo, las anotaciones
hechas a un niño deben servir para todos. De esta forma, el proceso será
constructivo y compartido. Dentro del marco del aprendizaje cooperativo,
también puede ser muy positivo que los niños entrenen sus lecturas con un compañero
o con un pequeño grupo antes de realizarlas ante la clase. Este trabajo ha de
ser necesariamente posterior al proceso de comprensión y de asimilación.
Debería ser posterior también a los primeros entrenamientos personales.
-Lectura:
Cuando los niños lean en silencio para saber si lo han hecho
correctamente hay que hacerles preguntas de memoria inmediata para saber si han
comprendido o no la lectura, haremos preguntas para ver si han realizado una
comprensión denotativa, que debe de ser la misma para todos los alumnos que
hayan leído el texto, indica una comprensión global.
Además cuando leemos en silencia seguimos una ruta visual,
si la ruta visual falla el proceso de la lectura será fallido, por ello debemos
ponerles textos sencillos y compactos para poder ampliar el campo visual de los
alumnos y reducir así el número de fijaciones.
-Después de la lectura:
-Actividad de memoria
a corto plazo:
Los niños tienen que tachar las palabras que no
aparecían en el texto:
-Actividad para
mejorar la atención:
Fíjate en el dibujo y pasa la página: Señala las cosas que han cambiado del
dibujo anterior:
-Actividad para
favorecer la habilidad visual:
Los niños tratarán de leer el texto de un vistazo.
Si los niños lo hacen bien, si usan la visión periférica
global, no se darán cuenta que el texto contiene un error, “ y “ aparece dos
veces, esto pasa porque no leerán todas las letras ni todas las palabras que
componen el texto. Sin embargo
entenderán perfectamente el significado de la frase.
-Actividad para
favorecer la fluidez y anticipación ocular:
El niño deberá leer este texto en voz alta:
Pollo:
Pollos, pollito, polluelo
Polluelos, pollitos, pollería,
Pollino, pollero, pollina.
-Actividad para la
comprensión global que incluya hipótesis o inferencias:
-Actividad para
mejorar la lectura en voz alta:
Los niños leerán el texto con distintas entonación según se
le indican el texto.
-Interrogación: ¿Había una vez un pollito inglés que se fue
a Francia y se volvió francés?
-Exclamación: ¡Un pollito francés!
Evaluación:
Autoevaluación: